- Compitieron 16 países de América, España y Portugal.
- Se trata de Franco Silva de la escuela Alicia Moreau de Justo y Lisette Rosses del establecimiento Gob. Brigadier San Martín.
Tras haber clasificado a la instancia nacional de la Olimpiada Ñandú, Lisette Rosses y Franco Silva formaron parte de la 30° Olimpíada de Mayo, una instancia iberoamericana donde participaron 16 países de América, España y Portugal.
Ambos estudiantes de 6to grado pertenecen al sistema educativo municipal; Franco asiste a la escuela Alicia Moreau de Justo (Villa El Libertador) y Lisette Rosses al establecimiento Gob. Brigadier San Martín (José Hernández).
La competencia, que se llevó a cabo en el Colegio Nacional de Monserrat, se toma en dos niveles: primer nivel, menores de 13 años, y segundo nivel, entre 13 y 15 años.
«Me gusta la matemática desde que iba al jardín», señaló Lisette Rosses. Además de las matemáticas, Lisette ha mostrado interés en la danza, las telas acrobáticas y la robótica.
Su madre, Carina Elizabeth, destacó el esfuerzo y dedicación de su hija: «Ella es una de las abanderadas y estudia porque le gusta. No tiene esa presión de mi parte obligándola todo el tiempo a estudiar; al contrario, lo hace por gusto propio».
Franco, aunque sabe la importancia del logro que representa acceder a un acontecimiento matemático de orden internacional, tiene claro su próximo objetivo académico. “Quiero estudiar donde estudia mi hermano, en Mirizzi”.
Su padre, Daniel, destacó las habilidades matemáticas de Franco desde pequeño y expresó su orgullo por sus hijos: “Estamos en todas con ellos, viendo sus progresos y resultados. No les hacemos faltar nada, y tratamos de incentivarlos en todo aspecto”.
Ambos estudiantes han atravesado diversas instancias desde la escolar, pasando por la interescolar, provincial, regional y nacional, hasta llegar a la Olimpiada de Mayo.
“Con estas iniciativas se promueven diferentes aprendizajes que no sólo son matemáticos, sino otros vinculados a la convivencia, el desenvolvimiento social, la comunicación, la colaboración, las dimensiones emocionales, o la metacognición”, expresó la secretaria de Educación, Alicia La Terza.
Desde nivel inicial y a lo largo de todos los años de escolaridad en el sistema educativo municipal, los estudiantes participan de eventos y olimpíadas de matemática, como Charito, Choike o Ñandú.
Detrás de cada logro hay horas de esfuerzo y dedicación. «El examen olímpico no es uno estructurado de problemas escritos, sino son desafíos y ellos los ven como tales. Hay veces que no se quieren ir a su casa hasta resolverlos», reveló Silvia, docente de la escuela Brigadier San Martín que entrena a los chicos y chicas por la tarde todos los días en el comedor de la escuela.
Sobre la Olimpíada de Mayo
Este evento es una competencia para jóvenes menores de 15 años.
“La prueba dura 3 horas, y para que chicas y chicos puedan prepararse, se les brinda los enunciados de esta competencia propuestos en los años anteriores”, explica Laura Vélez, referente en esta área del Ministerio de Educación de la Provincia de Córdoba.
“Como en otros países el día del evento no coincide con el nuestro, que se llevó a cabo el 11 de mayo en el Colegio Nacional de Monserrat, los participantes se comprometen a no revelar los enunciados hasta que acabe el mes de mayo, y que de ese modo la competencia sea justa y transparente”.
Pueden participar regularmente quienes hayan sido invitado por la Olimpiada Matemática Argentina, en este caso por haber participado de la instancia nacional Ñandú.
En 2024, las sedes en Argentina fueron: Bariloche, Buenos Aires, Comodoro Rivadavia, Córdoba, Corrientes, Mendoza, Misiones, Rio Gallegos, Rosario, Salta, Santa Fe, Tandil y Tucumán.